Violencia machista y elitismo

Cuando hablamos de malos tratos lo primero que se nos viene a la mente es que la mayoría de las mujeres maltratadas o/y asesinadas pertenecen a una clase social media o baja (clasismo, elitismo, aporofobia). Que si son migrantes (xenofobia, racismo), que si son de pueblo (a esto no sé cómo se le llama)... Las mujeres más informadas no sufren malos tratos. O sí? Poquitos casos de mujeres maltratadas y/o asesinadas de "buena familia" salen a la luz. Puede ser porque al ser minoría, pues claro, por proporción... Pero también es porque la gente poderosa obliga al silencio. Si una mujer muere a manos de su marido, hay dinero que puede frenar que eso se sepa. Contactos. Si una mujer es maltratada tiene que callar so pena de ser excluida de la comunidad rica a la que perteneces. Una comunidad de gente bien, de derechas, privilegiada, perfecta, muy católica, que no puede dar escándalos para no perder prestigio, honor. Tiene que callar porque quien la maltrata tiene poder también fuera de su casa. Tiene que callar porque su familia no quiere tener entre sus familiares a una víctima de malos tratos, que eso ensucia el apellido. Lo que digo no es una exageración, ni hablo del siglo pasado. Sigue pasando. Así que puedo dar gracias a que a pesar de haber sido maltratada en el pasado, no provenía de una "buena familia". Gente de posibles, se dice por ahí.

El incidente

En mi vida he cogido muy poquitas veces un avión. Creo que tres veces (ida y vuelta). Siempre he fantaseado con todos los lugares que quiero visitar, pero bueno, al final no he podido. Y creo que ya no va a ser, simplemente porque ahora conozco el impacto medioambiental que suponen tantos viajecitos en avión que nos damos alegremente como si no fuera nada. Y bueno, no seré yo quien acumule conscientemente más daño a nuestra Madre Tierra. Sé que soy solo una entre miles, pero en fin...

Esta noche he soñado que muchas personas soñábamos algo sobre salvar el planeta, todas habíamos soñado lo mismo, y que quien no lo había soñado desaparecía como en la película "El incidente" (bueno en la peli se suicidaban, en mi sueño iban desapareciendo).

Tenemos que hacer algo, algo más que ser cada día un poquito más conscientes con lo que consumimos. Si no estuviera tan impedida... me dan ganas de liarme la manta a la cabeza e irme con la gente de Greenpeace o similar a montar barricadas.

Portón

He soñado que estaba en un pub que había en una callejuela entre las calles Osario y Torres Cabrera (de Córdoba), cuyo dueño se llamaba Luis (era a finales de los años 80). Ya ni me acuerdo de cómo se llamaba. En mi sueño estaba todo decorado con telas amarillas y azules y yo estaba cantando en plan muy tipo karaoke a Lana del Rey (ochentera a tope, jajajaja). El caso es que llegó Julio Anguita, quien venía de vez en cuando por allí entre semana cuando quedaba poco para cerrar (o al menos los viernes y domingos), y el tío se sentaba allí, mayor que todes, a explicarnos sobre la vida y la muerte y todes les escuchábamos embelesades. Pero en mi sueño, yo dejaba de cantar y me acercaba para decirle que estaba equivocado, que él era un señoro blanco cishetero europeo y que portaba demasiados privilegios como para entender que el privilegio de clase era solo uno más. Todes en la mesa se callaron y luego se rieron, y yo volví a mi trono desde donde seguí cantando "Born to die" de Lana del Rey. Y eso que no llevaba la corona de flores, que si no, se hubiese cagado 

Hermanas mexicanas

Estoy llorando emocionada. Todo mi amor y mi fuerza con ustedes, hermanas mexicanas ♥♥♥

Feliz aniversario

Esta es la última fotografía de nuestros aniversarios. Es del 2017. Está movida porque es la última de una serie en la que ya estaba más centrada en el beso que en sujetar el móvil. El año pasado quisimos ir al bar donde fuimos el día que nos conocimos hace hoy 16 años, sabíamos que no tendríamos otra oportunidad. Pero estaba cerrado y nos conformamos con un restaurante que había cerca. Nunca volvimos juntos a ese bar, y nunca volveremos.

Cuando las cosas iban muy mal, cuando tuvimos que embarcarnos de un lugar a otro sin estar segures de nada, nos decíamos: "no importa donde estemos mientras sigamos juntes, nuestro hogar estará donde estemos"; también nos decíamos: "la felicidad es esto, estos momentos de estar juntes y de sentirnos juntes, no hace falta más"; incluso esa larga temporada horrible de no tener casi ni para comer, de aguar la leche para estirarla lo más posible, nos decíamos "claro, cómo vamos a tener dinero si ya tenemos la suerte de encontrarnos y estar juntes, no se puede tener todo". Me dio los mejores años de mi vida. A pesar de todas las catástrofes, cuando volvía la vista atrás solo sentía que había sido feliz con él, tranquila, segura. Cuando vuelvo la vista atrás, siento que he sido feliz todo el tiempo que he estado con él hasta que enfermó y se fue alejando de mí poco a poco, cerrándose a mí, guardándose su miedo y su dolor, dejando de compartir su vida conmigo.

Tal vez por eso me está costando tanto dejar de recordarlo a diario, varias veces al día. Vivo, me divierto, me preocupo, me enfado. Vivo. Pero siento como que hay algo que falla, que está equivocado. Y es que ya no está.

Tampoco quiero decir más, porque no acabaría de repetirme y repetirme añadiendo detalles cada vez en una larga letanía.

Te quiero, Fede. Feliz aniversario.

Feliz día del orgasmo ¿femenino?

Feliz día del orgasmo femenino, y al lado un coño. Di que sí, tope inclusivo.

La reivindicación es contra el mal-uso sexual que el patriarcado nos ha dado siempre a todo lo que es leído como mujer. Las mujeres trans también son mal-usadas sexualmente por el patriarcado y ellas no suelen tener coño. La mayoría de los hombres trans, y algunas personas no binarias que tienen coño, son mal-usades sexualmente por el patriarcado porque son leídes como mujeres.

Reivindicar el día del orgasmo "femenino" igualándolo al orgasmo "coñil" excluye a todas las personas trans y a muchas personas intersex que sufren el mismo mal-uso sexual que las cismujeres.

No seamos patriarcales nosotras también al reivindicar el placer de todo lo que no sea un cishombre, porque al fin y al cabo de eso se trata, de que el placer sexual deje de estar centrado en la polla de los cishombres.

Excluir a menores trans es inconstitucional

Se está leyendo por muchos lados que esta sentencia es una noticia megafabulosa. Joder... Luego no me extraña que se conformen con lo que se conforman y no sepan moverse para solucionar nada. Natalia Aventín, presidenta de Chrysallis y quien inició todo este proceso, lo explica en este artículo muy muy clarito.

https://chrysallis.org.es/excluir-a-menores-trans-es-inconstitucional/

Hermanas trans, gracias por hacerme mejor feminista

«Si ustedes no admiten que haya feminismos diversos, permítanme decirles que su feminismo, con sus risas histriónicas y ataques jactanciosos a las mujeres trans, a las mujeres que luchan como jabatas por ser quienes son y tener unas condiciones de vida menos inhumanas, es cualquier cosa menos feminismo: es machismo, es clasismo, es aporofobia, es despotismo, es supremacismo y, sobre todo, es cualquier cosa menos la tan cacareada –y ausente de su práctica– sororidad».

https://www.lamarea.com/2019/07/09/hermanas-trans-gracias-por-hacerme-mejor-feminista/

Servicios sexuales

Yo tenía cierta controversia con el tema del trabajo sexual. En realidad aún la tengo porque no puedo evitar que me repugnen los puteros. Y los puteros, que no son todes les clientes del trabajo sexual, son machirulos de mierda que utilizan a las mujeres como mercancía, que saben que esas mujeres a las que se follan pueden ser víctimas de trata y les da absolutamente igual. Esos son los puteros.

Por eso creo que igual que hay que diferenciar el trabajo sexual de la trata, hay que diferenciar a les clientes del trabajo sexual de los puteros.

Y por qué he llegado a esta conclusión privilegiada (no soy trabajadora sexual)?, pues porque en el Neolítico (y tal vez antes) e incluso después, existían sacerdotisas muy empoderadas que ofrecían servicios sexuales. Formar parte de ese sacerdocio era un honor que se elegía libremente, que tenía un camino de trabajo interior y en comunidad para llegar hasta allí, no era como que te metan a monja aunque no quieras o porque no hay otra salida, o que te obliguen, como ocurre en algunos países donde toman a niñas para prostituírlas en los templos. Contemplar la posibilidad de ofrecer un servicio sexual con naturalidad tiene más que ver con que en aquellos tiempos la sexualidad no era un tabú como lo es ahora, que parece que todo lo que tiene que ver con la sexualidad es absolutamente terrible.

Así es que he llegado a la conclusión de que el trabajo sexual no está mal. Ni siquiera me gusta la idea de que el trabajo sexual es a lo que se accede cuando lo único que hay a cambio son trabajos de servidumbre tan mal pagados que rozan la esclavitud. El trabajo sexual puede ser tan bello como lo es el trabajo de cuidados. Que el trabajo de cuidados esté denostado hasta el punto de que sea el peor pagado es culpa del patriarcado. Que el trabajo sexual sea denigrado hasta el punto de que parece ser lo peor que puede llegar a hacer una mujer, es culpa del patriarcado. Lo que está mal es el patriarcado. No deberíamos equivocarnos de enemigo.

Le echo de menos

Cuando leo una noticia que me escandaliza y quiero comentarla, le echo de menos. Cuando me río con un meme y quiero compartirlo, le echo de menos. Cuando me sube la ansiedad y quiero un abrazo que me calme sin juzgarme, le echo de menos. Cuando estoy cansada, triste, decepcionada, y necesito hablarlo, le echo de menos. Cuando me siento feliz, de pronto le echo de menos. Cada vez que me quedo a solas le recuerdo y le echo de menos. Si veo una película de amor, o de muerte, le echo de menos. Y es una jodienda porque me duele un montón, y me como esa punzada para no echarme a llorar cada vez. Respiro hondo y trago varias veces hasta que se me pasa el ahogo y las lágrimas vuelven a su redil.

Qué ganas tengo de poder recordarle sin que me duela tanto.